Detectores de humo

Tener detectores de humo en las habitaciones de los hoteles salva vidas. Es uno de los imprescindibles en materia de seguridad que puede ser interesante instalar incluso en una vivienda, pero que en un hotel o alojamiento es obligatorio.

Este tipo de dispositivos son sin duda, uno de los sistemas más eficaces y útiles para evitar que lo que empieza como un pequeño fuego pueda acabar convirtiéndose en una auténtica tragedia.

Nuestros detectores de humo

Qué son los detectores de humo

Cómo su propio nombre indica, los detectores de humo son unos aparatos electrónicos que detectan la presencia de humo o calor en el ambiente, en función del modelo elegido y, en ese momento, activan una alarma para alertar de la presencia de fuego.

Los detectores más básicos hacen que suene una sirena para alertar a las personas que se encuentran en el edificio, sin embargo, lo habitual es que estén conectados a una central de alarma que se encarga de avisar directamente a los bomberos. En el caso de instalaciones industriales o de hoteles, por ejemplo, además es común que se active algún medio de extinción automático.

¿Qué tener en cuenta al colocar un detector de humo?

Buscar la colocación adecuada es muy importante y lo ideal es ubicarlos en el techo de una estancia ya que el humo tiende a ir hacia arriba y es la manera para detectarlo más rápido. Normalmente se instalan en el centro de la habitación, ya que suele ser donde se concentran el humo y el calor, o al menos a 50 centímetros de las esquinas y, en el caso de optar por instalarlos en una pared, debe ser prácticamente llegando al techo para no reducir la capacidad de detección del dispositivo.

Otro dato importante a tener en cuenta es que se debe enviar la proximidad con fuentes de calor como radiadores o rejillas de ventilación. Y en el caso de que en el hotel haya algunas habitaciones con cocina, tampoco deben estar situados justo encima de la misma, todo ello puede ser engañoso para el detector.

También es importante hacer un correcto mantenimiento de los mismos, deben permanecer limpios para que los sensores funcionen correctamente y puedan detectar los incendios; cambiar las pilas o la batería con cierta frecuencia, para ello se puede realizar alguna prueba para ver si funciona o no; y finalmente, reemplazarlos cuando sea necesario, la vida útil de estos dispositivos suele ser de entre 8 y 10 años.

En Padword apostamos por la tecnología inteligente, tanto a la hora de buscar la comodidad y el confort de nuestros clientes con la instalación de termostatos para calefacción con un medidor de consumo eléctrico, o sensores de movimiento que pongan en marcha los sistemas de climatización al sentir la presencia del huésped, como al hablar de seguridad.

Somos conscientes de la importancia de que tu establecimiento esté seguro en todo momento, por ello, ponemos a tu disposición detectores de humo que te dé la posibilidad de estar al día de cualquier anomalía que se pueda producir y desembocar en un peligroso incendio.